Suelo desafinarme entre tus dedos,
y equivocarme de nota
y equivocarme de nota
al buscar el sonido de tu risa.
Me tropiezo al recordarte
Me tropiezo al recordarte
y caigo en un día de lluvia,
sin libros ni café.
Me pusiste el corazón del revés
y con cuidado escribiste en los domingos un entremés.
Dibujaste una salida de emergencia
Dibujaste una salida de emergencia
sin saber que mi única salida eras tú.
Me da miedo levantar la mirada
y ver como el mundo se me viene encima,
y el tiempo me empuja al olvido
escondido entre las cenizas del ayer.
Juego con la mala suerte a perderte,
tuteo la derrota con los dedos,
truco las cartas para volver a verte.
Ojalá no sea algo inerte, efímero.
tuteo la derrota con los dedos,
truco las cartas para volver a verte.
Ojalá no sea algo inerte, efímero.
Me gustaría vivir entre tus versos,
y descifrar cada metáfora que esconde un secreto que,
por causas desconocidas,
querías esconder en una poesía tan amargar como una día sin ti.

